Es una medida que, según pudo saber LA NACION, formará parte de la reforma migratoria que impulsa el Ejecutivo nacional.
El Gobierno nacional creará una agencia para promover ciudadanías para los extranjeros que inviertan en proyectos de más de US$500.000 en la Argentina. Se trata de una residencia para grandes inversores, “con la idea de simplificarle lo administrativo a quienes quieran venir a invertir”, informaron a este diario fuentes oficiales.
El organismo que estará a cargo de regular el otorgamiento de este beneficio funcionará dentro de la órbita del Ministerio de Economía. Esta agencia será creada en el marco de la reforma migratoria que el Ejecutivo anunció hace dos semanas y que se hará oficial en los próximos días a través de un decreto de Necesidad y Urgencia (DNU).
Las dos caras del proyecto migratorio
Según lo anunció días atrás el vocero presidencial Manuel Adorni, la reforma tendrá entre sus principales objetivos endurecer los requisitos para obtener la ciudadanía argentina y expulsar a los extranjeros que cometan delitos en el país. Esto implica que, a la vez que se buscará favorecer la residencia en el país de los grandes inversores, también se buscará restringir el ingreso general de extranjeros y facilitar la deportación de quienes delinquen.
El anuncio de esta reforma fue repetida en dos ocasiones por Adorni en su rol de portavoz de Javier Milei, durante las jornadas previas a las elecciones Legislativas en la ciudad de Buenos Aires, donde él fue candidato y salió ganador.
En esas dos ocasiones planteó diferencias entre la migración de finales del siglo XIX y la que llega actualmente a la Argentina. Dijo que en el pasado era “virtuosa, a base de trabajo y respeto por la ley”, y que “aportó su parte a construir la gran potencia que supo ser la Argentina”. A su vez, contrastó: “En algún momento el rumbo se desvió y desde hace tiempo tenemos una normativa que invita al caos y al abuso de vivos que lejos están de venir de forma honrada a construir un futuro de prosperidad. Hoy entra casi cualquiera, sin mediar muchas preguntas, y las condiciones de deportación son demasiado flexibles”.
Además, indicó que en los últimos 20 años ingresaron 1.700.000 personas de manera irregular al país, expuso que esa cifra es “equivalente a la población de La Matanza o Tucumán”, y dijo que los reiterados gobiernos fueron “demasiado permisivos” incluso con quienes llegan de manera regular.
El proyecto para inversores
El proyecto para facilitar la residencia en el país de grandes inversores extranjeros, a cargo del Ministerio de Economía -presidido por Luis Caputo-, aún no fue publicado en el Boletín oficial.
LA NACION consultó por más detalles del proyecto al Ministerio de Economía, Cancillería, Ministerio del Interior y Casa Rosada, pero no obtuvo respuestas.
Según pudo saber este medio, el documento aún estaría siendo revisado por la secretaria de Legal y Técnica, María Ibarzabal, para evitar su judicialización.
El Gobierno buscaría que la agencia a cargo se ocupe de la evaluación y certificación de los proyectos de inversión que requieran de los trámites, para así determinar la residencia en la Argentina de sus impulsores. El trabajo se haría en conjunto con el Ministerio de Relaciones Exteriores, que depende de Gerardo Werthein, y la Dirección Nacional de Migraciones, a cargo del jefe de gabinete, Guillermo Francos.